Hace un año estaba nerviosa, con esa incertidumbre de conocer a mi pequeña bebé, faltaban unas semanas para que la pudiera conocer, abrazar y sentirla. Mirando hacia atrás recuerdo que estaba impaciente por verle la carita y que mi hija mayor conociese a su hermana, ver su reacción y hoy puedo decir orgullosa que es una de las cosas más emocionantes y bonitas que he vivido, es algo tan mágico que no tengo palabras para describir. Estoy muy feliz de tener a mi segunda y ver como ya después de casi un año, mis hijas se tienen una a la otra, espero que sea así toda la vida y que puedan compartir y sentirse cerca siempre aunque por supuesto cada una haga su vida, pienso que el amor entre hermanos es algo tan especial, es un amor verdadero donde se puedo decir "la sangre tira". Hoy en Cataluña es la "diada de Sant Jordi" un día que me encanta y que plazas de pueblos y ciudades se llenan de puestos de libros y rosas, muchas rosas. Os cuento un poco de histor
y ahora ya van dos así que... "LA MAMÁ DE DOS PEQUECHULIS"